Y olió el SEÑOR olor de reposo; y dijo el SEÑOR en su corazón: No volveré más a maldecir la tierra por causa del hombre; porque el intento del corazón del hombre es malo desde su niñez; ni volveré más a herir toda cosa viva, como he hecho.
(Sagradas Escrituras)
Y el Señor percibió un grato aroma. Y el Eterno dijo en su corazón: "No volveré más a maldecir la tierra por causa del hombre, porque la inclinación del corazón del hombre es mala desde su juventud; ni volveré más a destruir a todo viviente.
(Nueva Reina Valera)