Y el sacerdote mirará después que la plaga fuere lavada; y si pareciere que la plaga no ha mudado su aspecto, bien que no haya cundido la plaga, inmunda es; la quemarás al fuego; corrosión es penetrante, esté lo raído en la faz o en el revés de aquella cosa.
(Sagradas Escrituras)
"Después que hayan lavado la plaga, el sacerdote la examinará; si la mancha no ha mudado de aspecto, bien que no se haya extendido, ese objeto es impuro. Lo quemarás. Es corrosión penetrante, esté lo raído en el derecho o el revés del objeto.
(Nueva Reina Valera)