Te ruego, oh SEÑOR, esté ahora atento tu oído a la oración de tu siervo, y a la oración de tus siervos, quienes desean temer tu nombre; y ahora concede hoy buen suceso a tu siervo, y dale gracia delante de aquel varón. Porque yo era maestresala del rey.
(Sagradas Escrituras)
"Te ruego, oh Eterno, que esté atento tu oído a la oración de tu siervo, y a la oración de tus siervos, que desean reverenciar tu Nombre. Concede ahora éxito a tu siervo, y dale gracia ante aquel varón". Porque yo servía de copero del rey.
(Nueva Reina Valera)